El programa "Tertulia Gregal", de Castalia Televisión, dedicó ayer -lunes día 30 de marzo- su programa semanal a la entidad Cáritas de Segorbe-Castellón. Como ya sabrán -Cáritas- es el organismo oficial de la Iglesia que expresa el amor preferencial de Dìos por los más pobres. Además, es una entidad sin fines lucrativos.
martes, 31 de marzo de 2009
Cáritas de Segorbe-Castellón, presente en Castalia Televisión
El programa "Tertulia Gregal", de Castalia Televisión, dedicó ayer -lunes día 30 de marzo- su programa semanal a la entidad Cáritas de Segorbe-Castellón. Como ya sabrán -Cáritas- es el organismo oficial de la Iglesia que expresa el amor preferencial de Dìos por los más pobres. Además, es una entidad sin fines lucrativos.
El Ayuntamiento de Almería concede a Manolo Escobar el Escudo de Oro de la ciudad
“Decidí realizar un estudio sobre los obispos de Segorbe indagando sobre sus personas y obras". Entrevista con el sacerdote y escritor, NUNO CARVALHO
Los beneficios recaudados por la venta del libro – que puede adquirirse en la librería Roses de Castellón o en la misma parroquia- servirán para sufragar parte de los gastos de restauración del tejado del templo parroquial de Torreblanca.
R.-Iniciando mi ministerio en Segorbe, por la proximidad a la Catedral y a la historia de la ciudad y dedicándome yo a la investigación en el área de historia de la Iglesia decidí hacer un estudio bibliográfico sobre los obispos de Segorbe. Indagando sobre sus personas y sobre sus obras. Por coincidencia, en ese momento, tuvo lugar la restauración de los cuadros de los prelados segobricences.
R.-La diócesis de Segorbe-Castellón es depositaria y propietaria de una de las bibliotecas más notables de toda la Comunidad Valenciana ubicada en el Seminario Conciliar de Segorbe, legado de los jesuitas, dominicos y obispos diocesanos que la nutrieron con el paso de los años de notables obras históricas, religiosas, teológicas y de otras áreas. Además, me serví de obras bibliográficas de carácter general como son las enciclopedias y diccionarios.
R.-En el siglo XVII se inició la formación de esta colección de retratos con la escuela pictórica de los Ribalta. Cabe destacar la intervención de maestros reconocidos como Blas González García, José Camarón, Manuel Camarón, y Vicente López, entre otros, que idealizaron, según el conocimiento de la vida y obra de los obispos de Segorbe, sus rostros. Por tanto, deducimos que es a partir de finales del siglo XVII cuando los retratos corresponden a los personajes.
P.-¿Cree que su obra ayudará a conocer con más detalle la historia episcopal de Segorbe?
R.-El trabajo de fondo ya está hecho por los obispos Juan Bautista Pérez (1592-1597) y Francisco de Asís Aguilar (1881-1899) así como también por el canónigo Villagrasa y el archivero Peregrín Llorens, los cuales indagaron en los fondos documentales de la catedral, hoy desgraciadamente perdidos. La pretensión de esta obra fue dar a conocer resumidamente los datos personales, biográficos y bibliográficos de los obispos de Segorbe. A partir de aquí los más curiosos e interesados por la historia se remitirán a las obras de los mencionados autores.
P.-¿Cómo estructura la obra al hablar de cada prelado?
R.-Me baso en los estudios ya realizados pero rectificando algunos errores de esas obras. Además, procuré atribuir a cada obispo su escudo episcopal. Con relación a los datos biográficos indagué la fecha de nacimiento y de muerte, su naturalidad y toda la trayectoria episcopal de cada prelado, especialmente cada una de las sedes que ocuparon.
P.-¿Qué le inspiró el hecho de observar cada una de las obras?
R.-Cuando nos adentramos en la pesquisa de una determinada obra histórica deparamos con personajes, inmensos en el silencio de los documentos esperando que revelemos sus hazañas y seamos benevolentes con sus errores. A menudo, sentí un deseo fisgón de imaginar el rostro de aquellos que se convirtieron en objeto de mi estudio. Así, les puse rostro.
P.-Como autor de este estudio biográfico ¿cómo valora la acción de los obispos en una iglesia diocesana?
R.-En todas las épocas, la acción de los obispos es valorada por su capacidad de pastorear la Iglesia que les fue confiada. Y así podemos destacar los diversos ámbitos en los cuales los obispos fueron figuras relevantes. Como no recordar el celo pastoral de D. Juan de Tahust o las Constitucional Sinodales de D. Sancho D’Ull. Sin olvidar la excelencia de pensamiento de D. Juan Bautista Pérez, D. Alonso Cano, D. Francisco de Asís Aguilar o de D. Lorenzo Lay, grandes difusores y fundadores de instituciones educativas como el Seminario de Segorbe. Pero también cabe mencionar las obras asistenciales que proliferaron por toda la diócesis en tiempos de D. Lorenzo Gómez, D. Domingo Canubio, D. Mariano Miguel y D. Luis Amigó, entre otros.
Como la historia siempre hay que verla en perspectiva, estos obispos –como los actuales- criticados en el contexto del momento logran un mayor reconocimiento y justicia por los que hoy contemplamos su obra. Desde luego la figura tan criticada y poco reconocida de los pastores de nuestro tiempo son análogas a los obipos de otras épocas. Acercarnos a sus hechos es reconocer la importancia de la figura del obispo, pastor que cuida el rebaño que Dios le ha confiado y tiene como deber ser imagen visible de la unidad de la Iglesia y de la encarnación del Evangelio en la sociedad.
El derecho a la vida: el más fundamental de los derechos humanos
Por más que se diga otra cosa o se nos descalifique, una vez más, tenemos que afirmar que el aborto provocado es en sí mismo una acción gravemente inmoral. Aunque la ley lo permita, aunque una mayoría parlamentaria decida lo contrario, abortar es moralmente ilícito, pues supone siempre la eliminación de una vida humana y la destrucción del propio hijo: el aborto es eliminar violentamente una vida humana, inocente e indefensa.
Cuando acabamos de celebrar el 60° Aniversario de la Declaración de los Derechos Humanos, hay que recordar que el derecho a la vida es el más fundamental de los derechos humanos. Es una ironía hablar de la dignidad del hombre, de sus derechos fundamentales, si no se protege a un inocente o se llega incluso a facilitar los medios o servicios, privados o públicos, para destruir vidas humanas indefensas. Los derechos humanos están por encima de la política y de los estados. Ningún Estado está legitimado para suprimirlos, sino que debe reconocerlos y garantizarlos con leyes justas. Ninguna minoría ni mayoría política puede cambiar ni vaciar de contenido los derechos de quienes son más vulnerables en nuestra sociedad o los derechos inherentes a toda persona humana. Al contrario: la protección jurídica de los derechos fundamentales debe ser una prioridad para todo Estado; es una exigencia de la justicia, la razón de ser, origen, medida y fin de toda política. Como nos ha recordado Benedicto XVI no puede existir un orden social o estatal justo si no respeta la justicia, y la justicia solo puede alcanzarse con un previo respeto a los derechos humanos y a la dignidad natural de todo ser humano, con independencia de la fase de la vida en que se encuentre.
El respeto a la vida de un ser humano inocente ha de ser norma de comportamiento privado o público para todos los hombres y mujeres que quieran vivir éticamente, para construir una sociedad justa y favorecer el progreso de la humanidad. "Nunca se puede legitimar la muerte de un inocente. Se minaría el mismo fundamento de la sociedad". (Juan Pablo II). En bien de nuestra misma sociedad, unámonos todos al Año de oración por la vida de la Conferencia Episcopal y favorezcamos con todos los medios a nuestro alcance la cultura de la vida.
(Escrito por el obispo de la diócesis de Segorbe-Castellón: D. Casimiro López Llorente. Publicado en el Periódico Mediterráneo, el miércoles 25 de marzo del 2009)
martes, 24 de marzo de 2009
Bendicen la bandera de l'Associació "Amics de la Música" de Figueroles
lunes, 23 de marzo de 2009
jueves, 12 de marzo de 2009
La Romeria a la Magdalena: una metáfora de la vida y de la espiritualidad
Tanto la explicación histórica como la explicación religiosa fundamentan el origen de una tradición: la Romería a la Magdalena. Y las dos se unen para hablar de colectividad. De un grupo de individuos a los que une una relación o que persiguen un mismo fin: en este caso, el camino hacia una meta para celebrar o rememorar un acontecimiento. Pues bien, para alcanzar este objetivo los miles y miles de romeros se encauzan en un camino. Un itinerario, que es, sin duda alguna, metáfora de la propia vida humana y espiritual.
La romería a la Magdalena es un camino como la propia vida, que debemos caminar. Algunos van lentos, otros van más rápidos para no perderse nada. Algunos prefieren ir en línea recta, porque quieren la tranquilidad y la seguridad que les hace sentir ver el sendero marcado, o también están los que prefieren coger otros senderos corriendo el riesgo de caer, perderse o encontrar algo distinto, nuevo y mejor. Los hay que van caminando, y otros van corriendo. También algunos paran para contemplar los paisajes y otros jamás les prestan la menor atención. Algunos tropiezan inmediatamente otros tardan un poco más, pero todos tropiezan alguna vez. Los hay que van solos, otros acompañados por multitudes o grupos de amigos. Otros llevan gente a sus espaldas, otros son llevados. También los hay que van de la mano de alguien. Sin olvidar, que el camino jamás es recto, a veces sube y otras veces baja. Tampoco es liso y nos podemos encontrar con piedras, arena, cemento,…Pero, ante todo, lo importante es caminar, seguir avanzando, sin pararse.
El gesto de caminar es un símbolo bastante expresivo de la fe cristiana. Indica siempre disponibilidad, decisión, búsqueda de algo o de alguien. Es la imagen de un cristiano o mejor de una comunidad que “peregrina”, que avanza hacia una meta importante de su fe. Que “sale” de una situación y quiere llegar a otra. Ya en las Sagradas Escrituras se nos indica el símbolo de este gesto. En el Antiguo Testamento, el libro de los Proverbios nos dice “que toda la vida del hombre es un camino”, y uno de los Salmos añade que “no sólo existe el camino de los justos sino también la senda de los malvados”. Y el punto culminante del simbolismo bíblico del camino es el testimonio de Jesús sobre sí mismo: “Yo soy el camino, la verdad y la vida. Nadie se acerca al Padre sino por mí”. Indicando, de esta forma, que él mismo es el camino para llegar a Dios. Por eso, todo peregrinaje o romería recuerda al cristiano que nuestra vida en la tierra sólo es una peregrinación al cielo.
También el gesto de caminar, desde un punto de vista social, supone la voluntad de avanzar hacia una meta. Como lo podemos fácilmente comprobar en las manifestaciones, marchas de protesta, en las huelgas,… donde tantas y tantas personas se agrupan con un mismo fin. Es decir, defender unos ideales, abogar por unos derechos justos que promuevan el bien común, gritar para que acaben el terrorismo y la violencia, etc.
De igual modo, el romero que va a la Magdalena, el tercer domingo de Cuaresma y se pone en camino para alcanzar su meta: el Castell Vell y el Ermitori, busca su ideal: formar parte de esa colectividad, rememorar su identidad o, bien, alimentar su espiritualidad.
INICIAR EL RECORRIDO
Avanza el castellonero por la calle Mayor hasta el Camí dels Molins, pasando por el Camí de la Travessa, hasta llegar a Sant Roc de Canet, donde es obligado probar la figa i el doset. Después, por el camino l’Algepsar sigue hasta la ermita, para allí celebrar la eucaristía, como meta de su camino. Durante todo ese recorrido el romero experimenta los sentimientos propios del caminante. Los símbolos y gestos del camino: las campanas, los cohetes, las paradas, la indumentaria, los cantos,… que representan las emociones y los sentimientos. Tienen su código, poseen su lenguaje, muchas veces oculto a la lógica usual que utilizamos en nuestra vida diaria. Por eso, cuando no se interpretan correctamente nos pueden conducir al error. O tan sólo dejarnos pasivos. Privándonos de oportunidades importantes que realmente pueden iluminar nuestra vida. Por ejemplo, la caña con la cinta verde que portan los romeros identifica a la gente con la colectividad. Pero también representa el apoyo necesario para soportar la dureza del camino.
En definitiva, el “camino” hacia la Magdalena es el trayecto que muchas civilizaciones, a lo largo de la historia de la humanidad, han seguido en busca de su identidad colectiva o espiritual. Es la búsqueda de lo común. Pero también el encuentro con el otro, y por qué no, con lo más trascendental. Y como dice Antonio Machado en uno de sus versos más conocidos: “caminante no hay camino se hace camino al andar”, que la Magdalena sea siempre ese camino para que los castellonenses vayan poco a poco construyendo un futuro de humanidad y religiosidad para promover siempre a través de sus tradiciones más arraigadas los valores de la fe, la esperanza y la caridad. (Este artículo aparece publicado hoy en el Extra de Fiestas de la Magdalena del Periódico Mediterráneo/ Fotos: Francisco Poyato y Manolo Nebot)
El meteorólogo y presentador de televisión Jose Antonio Maldonado impartió una conferencia en Castellón
La localidad de Llucena homenajea al centenario Marcelino Doménech
Miguel y Sara se dan el "sí quiero" en la parroquia de l'Alcora
miércoles, 11 de marzo de 2009
Una feria taurina de la Magdalena más "casera" que nunca
Las mujeres de Villahermosa del Río reivindican la igualdad
viernes, 6 de marzo de 2009
El conseller de Sanidad, Manuel Cervera, inauguró el nuevo centro médico de Figueroles
Según remarcó Cervera, "esta actuación es una muestra del impulso que la Generalitat está dando a la atención primaria, que se ha convertido en una prioridad durante esta legislatura". Al respecto, destacó que el citado fomento se fundamenta "no solo en la inversión en infraestructuras que estamos realizando, sino en las medidas que hemos aplicado para mejorar la gestión y la atención en este primer escalón del sistema sanitario, como son la desburocratización de las consultas y el papel creciente de la enfermería".
El nuevo consultorio, dependiente del centro de salud de l´Alcora, ha contado con una inversión de en torno a 300.000 euros ejecutada por el Ayuntamiento de Figueroles y sufragada por la Conselleria de Sanidad, en el marco del plan de adecuación de consultorios.
Dispone de tres consultas -dos para medicina familiar y comunitaria y pediatría, y una tercera de enfermería-, sala de espera, recepción y almacén, entre otros servicios básicos, ampliando el espacio respecto de las antiguas dependencias que existían.
Además, las nuevas instalaciones permiten llevar a cabo pruebas específicas como las de anticoagulación o la extracción de sangre para análisis clínicos.
El horario de atención continuará siendo el mismo que el del antiguo centro: todos los días de 9.00 a 11.30 horas, y las urgencias fuera de ese horario tienen como punto de atención continuada (PAC) de referencia el centro de salud de l´Alcora.
El alcalde, Luis Gregori, agradeció el interés de la Conselleria en este proyecto "por el que tanto hemos luchado y también a aquellos que han hecho posible que Figueroles haya pasado de tener uno de los peores consultorios de la provincia a tener uno de los más privilegiados".
Los más pequeños de Villahermosa celebraron el Día del Árbol
miércoles, 4 de marzo de 2009
Los alumnos del curso de baile de Villahermosa celebran el Carnaval
Carnaval infantil en Villahermosa y Llucena
Los más pequeños de Villahermosa del Río se disfrazaron de extraterrestres galáctivos, con nave incluida -como muestra la imagen superior- para invadir la población, puesto que realizaron un desfile por las calles del municipio. Después, todos juntos participaron en diversos juegos y concluyeron la tarde con una merienda. La localidad de Llucena se sumó también a las celebraciones de carnaval con diversos actos, entre ellos, un desfide protagonizado por los niños del colegio -fotografía inferior- por las calles de la población. Después, tuvo lugar la ceremonia del rey carnestoltes, y la tarde concluyó con una chocolatada patrocinada por el AMPA del colegio. (Foto de Llucena: Jose Luis Aparici)