Diez vecinos de Figueroles se encuentran desde hace algunas semanas realizando un taller de empleo de reciclaje profesional, enfocado especialmente a la albañilería de piedra en seco. Una subvención que ha sido concedida por la Consellería de Economía y Hacienda a través del SERVEF, a petición del Ayuntamiento del municipio y que está facilitando a los vecinos que están en el paro o simplemente no trabajan, la posibilidad de adquirir una formación específica en un oficio o actividad. En este caso centrado en la albañilería de piedra en seco -tan peculiar en esta comarca de l’Alcalatén-.
La actividad se desarrollará a lo largo de todo un año –con jornada laboral de ocho horas diarias- hasta diciembre de este mismo 2010. Y la formación de albañil y pareador se complementará con conocimientos básicos de alfabetización informática, sensibilización medioambiental, prevención de riesgos laborales, orientación a la hora de buscar trabajo e iniciación al conocimiento de las nuevas tecnologías.
“Es una forma de que la gente que está en el paro aprenda un nuevo oficio, como el de albañil o pareador y pueda al mismo tiempo conseguir ampliar sus posibilidades a la hora de encontrar un trabajo”, indica el director del taller, Ángel Bartoll, que se muestra satisfecho por los resultados obtenidos durante las primeras semanas de actividad. Además, añade, que “a los participantes se les va a entregar el certificado de formación de albañil, homologado por el SERVEF”.
Mientras tanto el beneficiario más directo será el municipio de Figueroles porque el curso contempla obras de interés social y patrimonial. Entre ellas, el saneamiento y refuerzo del contorno natural del río. También se prevé recuperar algunas paredes de bancales, el camino de acceso del río al pueblo, la fuente del Barceló –donde se construirá un merendero-, y la realización de un ecoparque.
Según el SISPE en el momento de comenzar el cursillo (es decir, en diciembre del 2009) la población de Figueroles tenía registrados 64 vecinos en el paro –de los 582 habitantes empadronados-. Y diez de esos desempleados son los que, actualmente, están realizando el curso. (Fotos: Ángel Bartoll)
La actividad se desarrollará a lo largo de todo un año –con jornada laboral de ocho horas diarias- hasta diciembre de este mismo 2010. Y la formación de albañil y pareador se complementará con conocimientos básicos de alfabetización informática, sensibilización medioambiental, prevención de riesgos laborales, orientación a la hora de buscar trabajo e iniciación al conocimiento de las nuevas tecnologías.
“Es una forma de que la gente que está en el paro aprenda un nuevo oficio, como el de albañil o pareador y pueda al mismo tiempo conseguir ampliar sus posibilidades a la hora de encontrar un trabajo”, indica el director del taller, Ángel Bartoll, que se muestra satisfecho por los resultados obtenidos durante las primeras semanas de actividad. Además, añade, que “a los participantes se les va a entregar el certificado de formación de albañil, homologado por el SERVEF”.
Mientras tanto el beneficiario más directo será el municipio de Figueroles porque el curso contempla obras de interés social y patrimonial. Entre ellas, el saneamiento y refuerzo del contorno natural del río. También se prevé recuperar algunas paredes de bancales, el camino de acceso del río al pueblo, la fuente del Barceló –donde se construirá un merendero-, y la realización de un ecoparque.
Según el SISPE en el momento de comenzar el cursillo (es decir, en diciembre del 2009) la población de Figueroles tenía registrados 64 vecinos en el paro –de los 582 habitantes empadronados-. Y diez de esos desempleados son los que, actualmente, están realizando el curso. (Fotos: Ángel Bartoll)