Las iglesias, que aguardan en su interior verdaderos tesoros y obras de arte -más que por su valor económico, por el histórico-, están comenzando a sufrir constantes saqueos en la provincia.
El último caso se ha dado en Zucaina, en la ermita del Calvario. Nada hacía presagiar lo que los ojos de las mujeres que colaboraban en la limpieza del templo antes de la procesión iban a contemplar: la imagen del cristo, de madera tallada y de más de un metro y medio de alto, había desaparecido. Tal y como comentaba el alcalde de la localidad, José María Ibáñez, "los ladrones forzaron uno de los accesos, una tela metálica, sacaron la imagen de allí y luego cerraron la puerta principal con llave". Ibáñez destacó que esta obra de arte data de finales del siglo XIX, por lo que su valor es "incalculable". Asimismo, añadió que "también se llevaron cuatro candelabros bañados en oro y una lámpara también dorada".
El último caso se ha dado en Zucaina, en la ermita del Calvario. Nada hacía presagiar lo que los ojos de las mujeres que colaboraban en la limpieza del templo antes de la procesión iban a contemplar: la imagen del cristo, de madera tallada y de más de un metro y medio de alto, había desaparecido. Tal y como comentaba el alcalde de la localidad, José María Ibáñez, "los ladrones forzaron uno de los accesos, una tela metálica, sacaron la imagen de allí y luego cerraron la puerta principal con llave". Ibáñez destacó que esta obra de arte data de finales del siglo XIX, por lo que su valor es "incalculable". Asimismo, añadió que "también se llevaron cuatro candelabros bañados en oro y una lámpara también dorada".
LOS MOSAICOS/No contentos con los objetos de valor sustraídos, los delincuentes también rompieron y sustrajeron los mosaicos de azulejo y las inscripciones de dos de las estaciones del Calvario. Juan Honrubia, teniente de alcalde, insistía en que "es una pena, porque han picado las imágenes y seguro que las han destrozado". El alcalde, José María Ibáñez, remarcó que las estaciones afectadas han sido la IX y la XIII, "esto es todo un sinsentido", manifestaba. Tanto el párroco de la localidad, Elías Sanz, como el primer edil, se acercaron al cuartel de Montanejos a interponer la denuncia y el robo está siendo investigado por los agentes.
Este periódico se puso en contacto con el sacerdote Elías Sanz, quien aseguró que la pieza de madera fue un regalo de sus antepasados a este templo por lo que lamenta la sustracción "profundamente", por el gran valor sentimental que tenía.
Este periódico se puso en contacto con el sacerdote Elías Sanz, quien aseguró que la pieza de madera fue un regalo de sus antepasados a este templo por lo que lamenta la sustracción "profundamente", por el gran valor sentimental que tenía.