“Matadme, yo os perdono mi muerte” eran las últimas palabras que pronunció mosén Juan Ventura Solsona antes de recibir una descarga de escopeta que le destrozó la cabeza, cayendo muerto en el acto. Era el 17 de septiembre de 1.936, en “los terrenos blancos” del Castillo de Villamalefa, cerca del “Remolcador”. Así moría a manos de unos desconocidos y en plena guerra civil española el sacerdote Ventura que nació en Villahermosa del Río el año 1.875 y del que se decía “que dio verdaderas muestras de celo y espíritu sacerdotal”.Enterrados sus restos en el cementerio del Castillo de Villamalefa fueron exhumados el día 29 de noviembre de 1953 y trasladados a Villahermosa del Río, en donde, en presencia de toda la comunidad católica de la localidad, se les dieron digna sepultura en la Capilla de la Comunión de la iglesia parroquial.
Después de iniciarse el proceso de su beatificación y de su declaración de martirio que se presentó a la Santa Sede y haber comprobado que el difunto vivió una vida de santidad, el día 11 de marzo de 2001, el Papa Juan Pablo II lo declaró Beato. Y con este reconocimiento oficial por parte de la Iglesia Católica era preceptivo que se realizara, de nuevo, su exhumación para colocarlo en un lugar visible para la veneración privada de los fieles, a la espera de que algún día pueda llegar a ser santo.
Ante la presencia de un tribunal eclesiástico, un miembro de la Comisión Histórica del Tribunal para la Causa de Canonización, un médico forense, los sacerdotes de la parroquia y varias personas que voluntariamente colaboraron, el día 27 de junio de 2006, eran exhumados los restos del Beato Juan Ventura Solsona. Después, los huesos fueron colocados en una urna -debidamente lacrada- y guarda en la sacristía, en espera de su definitivo traslado. Mientras se aprovechó para restaurar la Capilla del Santísimo Sacramento y preparar un nuevo sepulcro, en donde descansen definitivamente las venerables reliquias de este mártir de Villahermosa.
CLAUSURA// La parroquia de la Natividad de Nuestra Señora de Villahermosa del Río vivirá el próximo domingo día 25 de febrero un acontecimiento importante a nivel histórico y espiritual. El obispo de la diócesis de Segorbe-Castellón, Casimiro López Llorente, clausurará el proceso de reconocimiento y autentificación de los restos del Beato Ventura y bendecirá el nuevo sepulcro donde serán colocados definitivamente para la veneración de los fieles. La celebración tendrá lugar a las 11.30 horas de la mañana y contará con la presencia de los fieles de la parroquia y las autoridades locales.
De esta forma, la comunidad católica de Villahermosa tendrá en un lugar visible a este “sacerdote ejemplar” que “fue testigo con su sangre del sacerdocio y de la fe de Cristo”, y que ahora es todo un testimonio de valía y entrega para los cristianos de esta localidad.
